* Beneficia actualmente a 473 mil 360 capitalinos, de los cuales 293 mil 393 son mujeres y 179 mil 967 son hombres
Por Francisco Rodríguez
La diputada Claudia Elena Águila del Partido de la Revolución Democrática (PRD) afirmó que en la actualidad miles de adultos mayores enfrentarían desempleo, precariedad, mendicidad, discriminación e inclusive abandono de sus propias familias, de no existir una ley en la ciudad de México que los protege para que tengan una vida digna y con calidad.
La presidenta del Comité de Atención, Orientación y Quejas Ciudadanas explicó que en sus recorridos por unidades habitacionales y colonias populares, los hombres y mujeres de 68 años en adelante expresan su beneplácito por contar con la tarjeta de la pensión alimenticia que les otorga tranquilidad.
Mencionó que este sector vulnerable disfruta actualmente de un apoyo económico mensual, acceso a servicio médico, transporte y protección jurídica de manera gratuita.
De acuerdo a los resultados de la Encuesta de Percepción de los Derechohabientes de la Pensión Alimentaria del Distrito Federal 2010, el 80 por ciento de los adultos mayores adquiere con su tarjeta sólo alimentos, mientras que el 36 por ciento artículos de higiene personal y 34 por ciento medicamentos; el ocho por ciento ropa y calzado entre otros artículos.
En este contexto, la diputada del VIII Distrito dijo que esta norma que se ha consolidado como parte de la red de protección social más grande de América Latina que aplica el gobierno capitalino también los protege con una serie de derechos que deben ser respetados por propios y extraños.
Águila Torres detalló que actualmente hombres y mujeres son discriminados al solicitar nuevamente un trabajo en diversos sectores de la planta productiva; no les reconocen su experiencia y capacidad para desarrollar una función, “quieren puros jóvenes”, por lo que quedan indefensos y sin ninguna protección social.
Describió, que la citada problemática también engloba otros factores negativos como el rechazo de sus parientes, se vuelve una carga en la casa, en ocasiones hasta lo corren para no mantenerlos o los envían al asilo.
Por último, manifestó que ello es una realidad para las personas adultas mayores en la ciudad de México, por lo que desde hace una década el gobierno capitalino en turno promovió el apoyo total e irrenunciable para esta población vulnerable que ahora cuenta con los beneficios para una vida decorosa.
Los derechos de la ley publicada en la Gaceta Oficial del Distrito Federal, el 7 de marzo de 2000 son para los adultos mayores de una vida con calidad y libre de violencia, cero discriminación, respeto en su persona, protegido contra toda forma de explotación, recibir atención de su familia, de la sociedad y de las instituciones y gozar de oportunidades, así como vivir en entornos seguros, dignos y decorosos, entre otros.
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